Taxistas europeos ¿Los próximos desempleados?

El pasado 10 de Junio algunas de las ciudades más importantes de Europa como Milán, Berlín, Madrid, Barcelona y Londres fueron escenario de un paro masivo de un grupo específico de trabajadores: los taxistas. Pero, ¿De qué se podrían quejar los taxistas de ciudades con tanta demanda de transporte público como estas?

Sucede lo siguiente: El negocio del transporte público ha encontrado un rival muy poderoso gracias a la tecnología y la organización de los ciudadanos, se trata de la versión 2.0 de prácticas nada nuevas que anteriormente se conocían como "dar un ride" o "dar un aventón", pero que ahora se han organizado a través de aplicaciones que permiten que personas que van al mismo sitio compartan coche, aún siendo desconocidos. Blablacar, Uber o Taxipal son algunas de estas aplicaciones y básicamente consisten en indicar a dónde viajas, qué día y a qué hora, y los interesados en realizar el mismo trayecto pueden unirse a tu viaje y compartir gastos. Se trata de una manera ecológica y muy económica de viajar que se ha popularizado principalmente en Estados Unidos y Europa.

Gran parte del gremio de taxistas de las principales ciudades europeas consideran esto una competencia desleal, por lo que han solicitado al parlamento de Bruselas que regularice este tipo de prácticas; sin embargo, el ministerio ha declarado que su trabajo no es velar por los intereses de las empresas, sino por el bienestar general de la población, por lo que considera que no es posible llevar a cabo una negociación y que el gremio de transportistas deben adaptarse a estas nuevas tecnologías si es que estas benefician a la ciudadanía en general.

Muchos beneficios nos ha traído la tecnología. Es increíble por ejemplo, poder recibir nuestros correos, mensajería y facturas de manera electrónica y consultarlos en el momento que necesitamos gracias al correo electrónico; poder decidir qué queremos ver en la televisión sin comerciales con servicios como Netflix, poder realizar nuestros pagos a través de una aplicación móvil sin hacer largas filas en los bancos, comparar y comprar vuelos de último momento, y ni se diga de hacer compras desde la comodidad de tu casa gracias a los catálogos online. Todas estas innovaciones que son posibles gracias al internet, nos han ayudado a ahorrar tiempo y mucho dinero, y seguramente lo seguirán haciendo, el problema es que a la hora de sustituir al hombre por máquinas, muchas personas no se sentirán muy conformes y la molestia de algunos siempre será inevitable. Por eso, más nos vale visualizar muy bien el futuro antes de casarnos con un oficio o profesión que tal vez en unos años podría dejar de ser fundamental.